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Anónimo
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CONTINUACION...
Al terminar la canción me abrazo y me dio un beso en la boca, yo me quede un poco confundida pero en eso llego el otro chico guapo y también me abrazo y me dio un beso en la boca, comenzó otra canción y entre los dos me empezaron a bailar, yo estaba en medio de los dos y gracias a que había mucha gente bailando no se dieron cuanta que los dos me empezaron a subir la falda, yo trate de bajarla pero el que estaba enfrente de mi me agarro de las manos y me las puso en su cuello mientras que el otro ya libremente masajeaba mis nalguitas.
Como pude logre bajarme la falda e intente salir, pero uno de ellos con su fuerte brazo me tomo de la cintura y me atrajo hacia el, me beso y fue tan intenso ese beso que rompió toda resistencia que había presentado, hasta el punto que me abrace de el y empezamos a casi comernos con las bocas, el otro chico siguiendo el ritmo de la canción que estaba se me pego por atrás y me subió la falda, yo ya no puse resistencia y lo deje que metiera mano a su gusto.
Por varias canciones nos estuvimos besando entre los tres, me tocaban y metían mano por todo mi cuerpo, la verdad me calentaron y no pensaba mas que en tenerlos dentro de mi.
Les dije que ya me tenía que ir, ellos me acompañaron y fuimos hacia el auto, comprobé que mi esposo estaba casi inconsciente y los voltee a ver con una sonrisita en la cara, ellos entendiendo mi indirecta, uno de ellos tomándome de la mano nos dirigimos a su auto. El cual estaba en una área bastante obscura, ahí nos empezamos a besar, mientras el otro chico me subió la falda y fácilmente me quito la tanguita, el que me estaba besando bajo mi falda y quede desnuda de mis pechos y me parte de abajo, solo tenía enrollada la falda y mi blusa, los dos me tocaban y yo ya gemía de lo rico que estaba sintiendo.
Yo seguía besándome con uno de ellos mientras el otro me metía sus dedos haciéndome correrme en un muy rico orgasmo, después uno de ellos se bajo su pantalon y se recargo en el carro, me tomo de la cintura y dándole yo la espalda me empino y me jalo hacia el, me penetro tan bruscamente que inconscientemente di un grito, no tanto de dolor, si no de sorpresa.
Gracias a mis zapatillas tan altas quedaba a la medida del chico, y el mete-saca era durísimo. El otro chico tambien se bajo su pantalón y se puso enfrente de mi, su pene aunque no era muy grande me supo a gloria cuando de un solo intento me lo introduje todo en mi boca. Se la mamaba rápidamente, al compas de las arremetidas que me daba el otro chico, por unos 15 min me estuvieron cogiendo de esa manera.
Después se cambiaron de posición y el chico al que se la estaba mamando me empezó a penetra por atrás, y al que me acababa de coger se la empecé a mamar, creo que estuvimos nos diez minutos cuando de pronto el chico que me estaba penetrando acelero la cogida y de pronto me lleno mi vientre de una lechita muy calientita, yo al sentir esa lechita dentro de mi estalle en un largo orgasmo que hizo que al chico que se la estaba mamando le diera tremendas mamadas que en cuestión de segundos el tambien comenzó a venirse en mi boca y parte de mi cara.
Estaba toda despeinada, con lechita de un chico escurriéndome entre los muslos y con la cara llena de leche del otro, ellos me vieron y se empezaron a reir, me daban de nalgaditas y me decían que era una tremenda puta, que era una experta en sexo y que les encantaría seguir en contacto conmigo, yo mientras trataba de acomodarme mi vestido y la blusa les di mi numero de celular y les dije por donde vivía, ellos apuntaron mi numero y me acompañaron al auto.
Ahí seguía mi marido dormido, ellos me preguntaron que si era mi amigo, yo con mi risa picara les dije que era mi esposo, ellos pusieron una cara de asombro y solo se reían, me decían que era increíblemente puta, pero que no cambiara que hacía muy felices a los hombres, yo me sonroje y me despedí, ellos prometieron hablarme y me subí al auto.
En cuanto prendí el auto mi esposo se despertó, ve volteo a ver y me pregunto que si todavía estaba enojada por haberme ensuciado las zapatillas, lo mire y dando un suspiro le dije que ya no estaba enojada, claro que no le dije que dos desconocidos que ni siquiera supe sus nombres me habían dado una muy buena cogida en el estacionamiento y que traía la panochita llena de leche de uno de ellos y que mi cara de la del otro.
Llegamos al depa, con mucha dificultad logramos subir ya que todavía se sentía mareado, entramos y el directamente se fue a dormir, yo me acosté a un lado de el y al subírseme toda la falda pude ver que se me había olvidado mi tanga, e instintivamente me empecé a tocar, sentía como mi panochita estaba llena de lechita, tome un poco con mis dedos y la probé, sabia distinta a lo que estaba acostumbrada, era una mezcla de lechita del chico con mis propios flujos, sabia diferente pero aun asi me gusto.
Seguí tocándome, y comencé a calentarme, me quite la falda y la blusa, tire el bra y salí de la recamara, me fui a la sala y me recosté en el sillón, con una mano frotaba mi clítoris y con la otra metía tres de mis dedos. Mi panochita estaba empapada, y hacia muy fácil que me entraran los dedos.
Después de unos minutos sentí ese cosquilleo en mi culito y dejando de tocar mi clítoris, y aprovechando que estaba muy mojada, lubricando un poco con mis propios fluidos moje dos de mis dedos y me los metí fácilmente en mi culito, esa sensación de tener algo metido en mis dos agujeritos hizo que en cuestión de poco minutos estallara en un orgasmo riquísimo.
Quede exhausta pero muy a gusto, me quede dormida en la sala y mi esposo me despertó cuando ya estaba listo para irse a trabajar. Pensó que seguía un poco molesta por lo del antro y que por ese motivo me quede dormida en la sala, el verme desnuda ya se le había hecho costumbre.
Se fue y en mi mente estaba lo que paso en la noche anterior, me di cuenta que en mis propias manos estaba calmar todas esas ansiedades que me provocaba no tener sexo, y a pesar que los chicos de la noche no eran muy dotados, me habían hecho gozar mucho.
Pero a pesar de todo yo seguía con las ganas de una riquísima y enorme verga jajajaa, de verdad, esa mañana de viernes tenia una ganas increíbles de una enorme verga, fue cuando me di cuenta que podía manejar a mi antojo al tonto de mi esposo. Una llamada de mi comadre en la tarde me ayudaría en la forma de buscar la forma de satisfacer mi nuevo vicio jajajajaja, eso se los cuento después.