>>
Anónimo
/#/ 3673
[X ]
Me llevo hasta la cama y me coloco sobre esta mientras que seguía rociando mi cuerpo con el aceite, y esparciéndolo con sus manos, le pedí que se acostara, en cuanto lo hizo lo monté, me acosté sobre el para darle un largo beso y con una mano iba guiando su verga a mi culo comenzando un bombeo rápido, y me tomaba de ambas muñecas dejándome los brazos en la espalda, sometida a la voluntad de su ritmo. Fue bajando la velocidad y entonces me fui incorporando todavía clavada, montada sobre él, mientras de que intentaba seguir moviéndose y yo manteniéndome quieta, como si estuviera jineteando un caballo salvaje, hasta que se quedo quieto y apoyada de su pecho fui bajando, clavandome en esa parada verga de la cual tenía poco mas de la mitad dentro; cada vez bajando un poco más, entre suspiros y jadeos cada vez consiguiendo que entrara un poco más, hasta que al final el agujero entre mis nalgas estaba lo suficientemente abierto para sentir que había llegado hasta la base y cuando lo conseguí me quede sin moverme, completamente agotada y tan abierta que lo único que podía hacer era estar jadeando como perra en celo, con la boca seca y al mismo tiempo limpiando el sudor de mi frente, hasta que pude reponerme y estaba decidida a ser yo quien ahora impusiera el ritmo. Estuve jineteando sobre esa gruesa verga cada vez mas rápido, moviendo mis caderas hacia atrás, hacia adelante y por momentos haciendo círculos hasta que me tomo de las muñecas y me detuvo.
- ¡Detente, me voy a venir ahora si sigues así! (grito con urgencia)
Por un momento quise moverme todavía mas rápido y hacerlo terminar, pero por otro lado quería extender lo máximo el momento de placer, por lo que saque su pene y me recosté a un lado de él, mientras con mis manos tocaba mi propia verga y pasaba mi mano por el pecho, cuello, hasta mi boca, para lamer mis dedos, en un completo extasis, por un momento olvidando que seguía a mi lado, mientras me centraba en mi propio placer. Sentí que me comenzaba a lamer mis tetillas y me pedía que volviera a montarlo, pero esta vez decidí que sería mejor hacerlo mientras le daba la espalda para que viera la manera en que mi culo tragaba su pene por completo. Estuve moviéndome muy poco cuando comencé a sentir que me estaba quitando las medias y acariciaba mis pies desnudos mientras me pedía que siguiera moviedome, pero el cansancio se había apoderado de mí y apenas me movía. Me recosté sobre de él, sintiendo que mi espalda se pegaba a su pecho húmedo tratando de reponerme un poco, cuando jalo mis piernas por las corvas y comenzó a penetrarme como loco, luego me jalo hacia un lado y me dejo boca abajo levantándome las nalgas, separándolas con fuerza para ver mi agujero abierto, pero estaba cansada para seguir en esa posición, me gire de espaldas y moviendo un dedo le indicaba que viniera hacia mí.
Levanto mi piernas, puso uno de mis pies en su boca y el otro descansaba sobre uno de sus hombros lamiéndome y chupandome con voracidad mientras iba clavándose nuevamente, moviéndose a un ritmo bestial que me hizo sujetarme de la sabana, cada vez empujando más con sus fuertes embestidas haciendo que la sabana saliera de su posición, meciéndome fuertemente sobre la acolchonada cama que estaba humedad, hasta que en suspirando separo mis piernas y se clavo todavía mas en mí, a la vez que se inclinaba dejando mi cuerpo completamente cubierto por el suyo, jadeando fuertemente. Mi pene estalló en una eyaculación bastante abundantemente dando apretones sobre el grueso y caliente rabo que tenía dentro, a la vez que él comenzaba a descargar en cálidos torrentes su leche en mi interior, mientras su rabo pulsaba mi culito apretaba rítmicamente para sacarle hasta la ultima gota, mientras lo jalaba de las nalgas para que se clavara mas profundo en mi interior.
Después de que se quedo ahí descargando su leche comenzó a ponerse flácido, luego comenzó a roncarme al oído, entonces me di cuenta de que se había quedado dormido encima mío y entonces vino la pregunta a mi mente: ¿como demonios voy a salir de aquí abajo?
Fin