Es mi historia, cuando tenía once, mi mamá decidió llevarme a conocer a mi papá y a su nueva familia, estuve viviendo con ellos durante más de medio año y en eso tiempo nunca imagine que perdería la virginidad con mi media hermana, y medios hermanos.

Para que esta historia no sea demasiado larga les contaré que mi papá estaba juntado con una señora godita pero con tremendas tetas, esa señora tenia una hija de once o trece y un hijo de ocho a diez años, de otra familia, y mi papá tenia dos hijos con esa señora, Alberto y Fernanda, Alberto era mayor que yo por 4 años y Fernanda tenia como nueve.
Al principio todo era normal, pero recuerdo una noche que carlitos, el hijo de mi madrastra se quedo conmigo viendo la tv en el cuarto donde dormíamos Alberto, Aranza (la niña de doce o trece) y yo. Mientras veíamos la tv paso una escena donde a una chava la intentaban violar, y carlitos me dijo que el sabia que es lo que le hacían, solo me reí y le di el avión, pasaron unos minutos y el niño comenzó a morderme por todas partes, no sé si era la edad pero se me empezó a poner dura la verga, hasta que le dije a carlitos que parara o que lo haría morderme otra cosa, en eso el se detuvo y dijo que a el le gustaba morderla, y que lo solía hacer con mi hermano Alberto, no podía creer lo que me decía, así que le dije que no le creía que si era verdad lo hiciera conmigo, en eso se recostó en la cama y me empezó a morder muy levemente la verga enzima del pantalón. Por la calentura procedí a decirle que bajara mi ropa y que metiera mi pene en su boca, y eso hizo, con sus manos pequeñas bajo mi ropa y mi pene ya erecto fue colocado en su boca, me empezó hacer la primera mamada de mi vida. Estaba tan caliente que no dure mucho y termine llenándole la boca, y solo comenzó a decir que eso le daba asco, pero se trago todo como un experto.

Después de eso, le pregunte que quien le había enseñado eso, y el me respondió que Alberto, que el solía llevarlo a los cuartos donde no había nadie y lo hacia chuparle la verga, y que en ocasiones se la chupaba a el, también me conto que muchas veces llego a meterle la verga en su culo y que al principio de le dolia, pero después le fue gustando.
No sabia como tomar eso, solo sabia que en ese momento estábamos solos y que era mi oportunidad para meter mi verga en un culito, asi que lo puse en cuatro, le baje su ropa, le chupe su culito rosado y comence a restregar mi verga en su culo, hasta que poco a poco entro, ¡era la gloria, tan apretado y caliente! El comenzó a moverse poco y gemía raro pero se sentía muy bien, hasta que escuche como abrieron la puerta de la recamara y Alberto nos vio, sentía que me iria a acusar, tuve mucho miedo.

Alberto solo cerro la puerta y me dijo, que diera gracias que el fue el que abrió la puerta, que si iba estar de cochino que cerrara bien, me sermoneo un rato y al final me dijo… ¿Qué haras para que no te acuse? Le dije que lo que fuera, asi que el no dudo y me pidió veo como carlito me chupaba la verga, asi que obedecimos, mi pene no se quería parar por el miedo asi que Alberto se desepero y me dijo que como no se quería parar tendría que aprender a chuparle la verga, se sento en la cama y me obligo a incarme, se saco su verga como de 17 cm y me obligo a chupársela… la verdad yo no quería, y olia rara, pero el miedo pudo mas, ahí estaba yo, poniendo la verga de mi medio hermano en mi boca, con dolor en la quijada y sin poder respirar bien, creí que solo seria eso, hasta que saco su berga de mi boca y me pido ponerme en cuatro, no quice hacerlo y solo sentí un golpe en mi estomago y un sinfín de amenazas, me coloque en cuatro y Alberto, me bajo el pantalón, yo no quería pensar en nada, hasta que sentí un liquido en me ano, y como me metia los dedos, sentía mucho frio, recuerdo que no dejaba de titiritiar, hasta que me empezó a meter su verga erecta, me dolia mucho, pero también empezaba a sentir rico, estuve asi como por quince minutos hasta que sentí muy, muy caliente dentro de mi, y Alberto al sacar su verga me dice, desde hoy también eres mi putita, y carlitos será tu putita.

Pasaron dos otres días endonde me cogían sin parar y yo me deslechaba en carlitos, hasta que Alberto me confeso que en ocaciones veía como nuestro papá se cogia a Aranza, y que lo hacia cuando nuestra madrastra no estaba o cuando ella estaba muy borracha, después de eso las cosas cambiarian, veria como mi papá se cogia a su hijastra, como comenzó a valernos y cogíamos enfrente de ella y como ella se unia para tener sexo con nosotros, lo mas intenso es que llegue a chuparle las tetas a mi madrastra y a meterle los dedos mientras estaba super borracha, aun extraño esa época.